El paso del tiempo ha contribuido a que el modelo de negocio pase por cambios y en la actualidad es poco común encontrar a una empresa sin que ésta haya incorporado y desarrollado en su estructura la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) en forma paralela con la sostenibilidad.
Es por ello que actualmente pequeños y grandes negocios se interesan en el desarrollo de estrategias de RSC y, al ejecutarlas tratan de comprometer a sus colaboradores con este entorno para crear una identidad como una organización empresarial que integra preocupaciones sociales, con el cuidado del medio ambiente y la ética, además de atender las necesidades y preocupaciones de la clientela.
Establecer una estrategia de RSC que represente la misión y la visión de una empresa y organización es una clave importante para que esta funcione y aquí te compartimos cuatro fases para desarrollarla:
- Reflexionar sobre el impacto y alcance de la RSC
El negocio o empresa decide qué nivel de impacto o alcance tiene la RSC en su organización con base a los aportes que ésta realiza en la sociedad, además sobre la forma en que realizará la gestión de la eficiencia económica para alcanzar mayores y mejores índices de aceptación social.
- Elaborar una estrategia que se integre globalmente a la empresa
En esta etapa se deben analizar las prácticas que ya se llevan a cabo y crear una estrategia con acciones que se relacionen con la RSC. Junto con esto se deben identificar los grupos de interés y establecer las prioridades a fin de enfocar la mayor atención de acuerdo con su impacto en la cadena de valor de la empresa o negocio.
- Desarrollar programas
Ya establecidas prioridades y focos de atención, se deben definir programas de acción que incluyan actividades a realizar y los medios para llevarlas a cabo. Aquí deben contemplarse aspectos como: alcance económico de la empresa, gestión y consumo ambiental, además del aporte social enfocado al personal, sus índices de satisfacción, identificación, entre otros.
- Retroalimentación
Sumamente clave es actualizar a todos los involucrados de las actividades y resultados de la estrategia de RSC y su desarrollo dentro de la empresa, ya que esto puede tener un impacto positivo entre los colaboradores, al sentirse involucrados en la misma y, a nivel del negocio, en nuevas oportunidades en espacios que antes se veían como ajenos.
La comunicación interna de la empresa o por medio de redes sociales son herramientas clave para cumplir con este propósito.