La receta es usualmente la misma: usted cuenta con un producto, un servicio o una marca y a pesar de que lo está haciendo muy bien y que lo que ofrece es de una muy buena calidad, siente que su público no incrementa o que simplemente no se está dando a conocer. Por ese motivo, le dejamos cinco consejos para mejorar la reputación de su negocio.
Busque comentarios de sus clientes
El principio “nadie es perfecto” aplica para la vida real y también para la virtual, así que seguramente una vez pida comentarios a sus clientes, muchos pueden llegar con críticas o con opiniones que pueden llegar a ser hirientes, pero eso le ayudará a mejorar sus productos y a entender la relación de sus clientes con los mismos.
Todos los comentarios son valiosos, incluso los más fuertes son oportunidades de aprendizaje. Los usuarios premian a las marcas que responden a las críticas, porque entienden que se están haciendo cargo de sus errores.
Con el fin de obtener estos comentarios, le aconsejamos dos estrategias. Primero, monitorear el uso de sus productos: pregunte a sus usuarios cómo les ha ido con los servicios. En el caso de restaurantes, hoteles o productos de consumo, es muy fácil trackear las reacciones. Segundo, lance novedades con la ayuda de sus clientes, cree concursos o activaciones de nuevos productos en los que el retorno sea el comentario de sus consumidores.
Expanda su presencia de acuerdo a su público
No se trata de estar en todos los lugares, ni tampoco estar solamente en un lugar; cada marca tiene un público y la idea es llegarle al mismo. Por eso, busque lugares donde su público busque información, como LinkedIn, Facebook, Instagram o TripAdvisor. Recuerde, lo importante es distinguir qué consume su público, si se trata por ejemplo de un público muy joven, seguramente no necesitará de una Fan Page en Facebook, pero quizás una estrategia que haga uso de TikTok o de Instagram podría venirle muy bien. Lo mismo sucede si su negocio es un restaurante o un hotel, usted necesitará estar en páginas de comentarios como Booking o TripAdvisor. Lo importante es reconocer a su público y hacer estrategias de contenido que puedan llegarles a ellos, no simplemente publicar por publicar
Use Influencers pensando en su marca
Es cierto, el uso de influencers es la estrategia más novedosa de marketing, sin embargo esto no quiere decir que todos los influencers sirvan para todo, lo cual es un error muy usual que cometen las marcas. No solo hay que dejarse llevar por los números, muchos influencers tienen números de alcance increíble, eso es cierto, pero responden a ciertos públicos. Por ejemplo, si su marca es un hotel de lujo y usted contrata a una persona que tiene gran acogida entre un público más popular, lo más seguro es que reciba comentarios negativos o rechazo ante esta persona.
Por tal motivo, plantee una estrategia alrededor de la persona, busque sus afinidades, el público que lo sigue, que tan afín es a su marca. No olvide que un influencer es un medio más de comunicación, el cual debe ser curado y cuidado. Las personas cada vez más responden a contenidos orgánicos y no simplemente a recomendaciones que parecen pagadas, por lo cual, asegúrese de crear contenido original y que se sienta natural, que vaya en línea con su público y sus objetivos.
Observe a sus competidores
Plantee las preguntas más básicas, ¿qué están haciendo bien ellos? ¿Qué estoy haciendo bien yo? Desde ahí empiece a ver sus contenidos, a entenderlos, toda esta información es crucial para un mejor desempeño.
Actualmente existen muchas herramientas que le permiten monitorear no solo sus redes, sino también la de sus competidores, así que esté atento a los movimientos de su competencia. Afortunadamente casi todas estas cosas son públicas, y tiene mucho de lo que puede fijarse, desde su página WEB, su tipo de Posteos, el uso de influencers. Todo puede ser una oportunidad para alcanzar o superar a sus competidores.
Sea consistente en su contenido
Quizás el mayor pecado de las marcas es aburrirse de sí mismas; es decir, vemos tantas veces el mismo concepto, los mismos colores, el mismo tipo de publicaciones que asumimos que nuestros consumidores las ven de la misma forma.
Sin embargo, según estudios de Campaign, a solo 4 de cada 100 anuncios que una persona ve al día, se le presta más de un segundo de atención. Esto quiere decir que esa campaña y esos colores que vemos todos los días como dueños de la marca, para el público puede ser la primera vez que lo vean o que lo tengan en cuenta. Pero, estos números contrastan con lo que llamamos memoria por repetición: no necesitamos que nos digan que el semáforo es rojo, amarillo y verde, lo hemos visto tantas veces que ya asumimos cómo es y cómo funciona. Éste mismo principio funciona para las marcas, empezamos a distinguir sus colores y lo que dicen tantas veces que ya sabemos que son ellas.
Lo importante, de tal manera, es ser consistentes. Cuando el contenido se vuelve muy dispar es difícil para la gente entender de qué le hablan, lo mismo ocurre con los algoritmos que agrupan el contenido, si cada una de sus publicaciones son diferentes, quizás él lo envíe de manera diferente. Por eso necesitamos consistencia en todo lo que decimos y cómo lo mostramos.